jueves, 30 de octubre de 2014

martes, 21 de octubre de 2014

Inocencia rota




Hermosa paloma
de suave plumaje,
caballo salvaje
galopas sin doma

Proyectas el vuelo
aún con torpeza
persigues un sueño
vivir con grandeza

Alzaste tus alas
sin ver tu camino
certeras las balas
funesto destino.

Espuma que mana
la sangre candente,
nace otra mente
cubierta de grana.

Acallas el duelo
comienza la caza
y buscas consuelo
en tu misma raza.

Y rompes cadenas
retomas tu sino
al viento tus penas
se abren camino.

Noche estrellada
de luna radiante,
susurro vibrante...
y triste mirada.

lunes, 13 de octubre de 2014

Naturaleza




     La noche llega, oscura y fría y tras el manto negro que cubre nuestros pasos y la lluvia que moja nuestros pensamientos, sentada frente a la ventana... se escapa un suspiro.
     La lluvia riega incesantemente la tierra, la fertiliza, la fortifica y la libera de las malas hierbas, rejuvenece los tallos y limpia las raíces infectas.
     A través de un pequeño hueco de la ventana respiro profundamente el aroma a tierra mojada, y se llenan mis pulmones de esa fragancia , de esa sensación de renovación, de ese perfume intenso que trae a la memoria tantos y tantos recuerdos de infancia.
     Sigue lloviendo, y lo hace con una fuerza dispar, continua. Y la tierra la abraza, la besa, la acoge con verdadero entusiasmo, asimilando cada gota, cada partícula que la penetra y la revive. Sedienta y seca, se hidrata; árida y estéril es fecundada.
     Sigo mirando la lluvia y me atrapa. Siento frío, pero no puedo moverme; como hipnotizada por el caer del agua miro perpleja como lo que es malo para mi, es bueno para la naturaleza, como las cosas que nos desagradan tienen un fin que nos desconcierta.
     Como una autómata me levanto y me dirijo afuera. Una fuerza sin control hace que mis piernas se agiten y mi cuerpo se alce situándose bajo la noche.  Miro hacia el cielo sintiendo como la lluvia me empapa, como moja cada centímetro de piel, extiendo los brazos para que me cubra por completo. Necesito sentir esa fuerza renovadora,  esa frescura que se introduce por cada poro, quiero que el agua arrastre mi tristeza y limpie de dolor mi espíritu.
     Miro hacia el cielo y grito con fuerza... ¡Si es bueno para la naturaleza, también es bueno para mi!.

    "La naturaleza está repleta de razonamientos que no tuvo nunca la experiencia" Leonardo Da Vinci.

viernes, 3 de octubre de 2014

En la taberna




¡Camarero! hágame el favor,
sírvame una copa de vino
necesito ahogar mi dolor
y retar en duelo al destino

Añada también un aguardiente,
un orujo, para los valientes,
aún tengo asuntos pendientes,
luchas entre corazón y mente

Preciso sofocar este ardor
que está consumiendo mi cuerpo,
avanzan las manillas sin pudor,
se está agotando mi tiempo.

Y un vodka para olvidarme
de mis absurdas indecisiones,
cobardía y lamentaciones,
mil excusas para no quedarme.

Camarero, ¿me hace el favor?
no atienda a mi desatino
déme la cuenta sin ningún rubor
y un whisky para el camino.


*Quiero dar las gracias a mi querido amigo y artista Luis Muriel, por cederme esta pieza de su obra pictórica.